INFORMACIÓN TURÍSTICA |
RUTAS |
Vamos a partir desde Potes para llegar a Ojedo e iniciar la ruta que
atravesando los municipios de Cabezón de Liébana y de Pesaguero, nos
conduce hasta el puerto de Piedras Luengas.
El primer pueblo que encontramos es Frama, a
orillas del río Bullón, con importante historia ya que en las
cercanías del barrio de Lubayo, aún se conocen los restos del
antiguo monasterio de Santa María, que dominaba el valle. Merece la
pena visitar la iglesia parroquial, construida en el año 1.766,
según reza una inscripción en el frontal de la espadaña y que
conserva una puerta de entrada románica de arco algo apuntado, con
arquivoltas de medio punto.
A poco de salir de Frama, una desviación a la
izquierda nos lleva al antiguo valle de Valdeaniezo, a las faldas de
Peña Sagra y compuesto por los pueblos de Cambarco, Luriezo, Cahecho
y, Aniezo. Cambarco, está al comienzo del valle y se encuentra
bastante diseminado, pero merece la pena recorrer sus callejas y
contemplar la arquitectura popular de sus edificios. Llegamos a
Luriezo, en el que lo más significativo es una estela
cántabro-romana de forma circular, tallada en piedra arenisca, que
se encuentra en el portal de la iglesia parroquial. Nos acercamos a
Cahecho, denominado “el balcón de Liébana”, debido a la maravillosa
panorámica que desde el pueblo se contempla, pudiendo realizar un
pequeño recorrido a pie hasta el Collado de Taba, para completar la
visita con una nueva panorámica, esta vez, del valle de Cillorigo y
el macizo Oriental de Picos de Europa.
Aniezo, con su barrio de Somaniezo es el final
del valle. De Aniezo, dice la tradición oral, que allí nació Beato
de Liébana. Podemos recorrer las calles y conocer el puente romano,
el viejo molino y la pisa, o batán, que aprovechaba el agua del
riachuelo para mover los mazos e infurcir los tejidos que llegaban
desde el telar de Cabezón de Liébana. Aniezo, es el pueblo de la
“Santuca” , patrona de Liébana, que se encuentra en su santuario de
Peña Sagra, al cual se accede por una bella pista de montaña, desde
el barrio de Somaniezo y que todos los años, el día 2 de mayo, es
llevada en andas por los fieles devotos y recorre de madrugada los
pueblos del valle hasta el monasterio de Santo Toribio, regresando
al atardecer, en una procesión que presume de ser la más larga en
recorrido de España.
Volvemos a la carretera general que nos conduce a
Piedras Luengas y, dejamos atrás a orillas del Bullón, el barrio de Cabariezo, para llegar a Cabezón de Liébana, capitalidad del
municipio, que conserva, en el cementerio, la que fuera puerta y
capilla mayor de la antigua iglesia parroquial. Llegamos aTorices,
donde hubo dos monasterios, San Marín y Santa Cristina y una
iglesia, en cuyo interior hay interesantes retablos y tallas
populares y una magnífica pila bautismal.
Antes de llegar a Puente Asnil, una carretera a
la derecha de la ruta a Piedras Luengas, nos conduce a Piasca, donde
se encuentra la Iglesia románica de Santa María, visita obligada.
El concejo de Piasca, estaba compuesto por dos
parroquias, una de ellas la formaba Piasca, Ubriezo, Aceñaba y la
Casilla; la otra por Tabarniego, Los Cos y Yebas. Podemos realizar
una visita a dichos conjuntos rurales para conocer más a fondo la
arquitectura popular y contemplar muchos de los aperos de labranza
que han dejado de utilizarse y que se encuentran retirados en los
rincones más insospechados.
El último recorrido por el Valle de Cabezón de
Liébana antes de entrar en el de Pesaguero, lo vamos a realizar
pasando al antiguo de Valderrodíes, en él y por este orden
encontramos los siguientes pueblos: Perrozo, con seis barrios y
donde desde el siglo XI se documenta el monasterio de Santa María.
Junto a la puerta de entrada a la iglesia del pueblo se conservan
dos olivos de gran antigüedad; Torices y San Andres, donde destacan
las viejas casonas y varios escudos de bella talla y por último,
Buyezo y Lamedo, poblaciones famosas por ser sus habitantes grandes
artesanos de la madera , en especial, en la fabricación de albarcas
y grandes cazadores de los osos que antaño poblaron sus montes. |